Icono del sitio Ilustrando Dudas

Cómo gestionar la creatividad – Repasando la maravillosa charla de John Cleese

Por favor, dime que has visto esta charla. La charla de John Cleese (uno de los Monty Pythons) sobre cómo potenciar la creatividad. ¿Que nooooo? Dios mío, pues ya te estás haciendo palomitas, sacando punta al lápiz y cogiendo la libreta para tomar notas. ¡No puede pasar ni un minuto más de vida sin que la veas! Es brutaaaal.

Al final de este artículo te la dejamos para que la veas, ¡y  con subtítulos en español y todo, para que no te nos quejes! jeje.

Vamos al lío, en este artículo voy a ir comentando las cuestiones más interesantes de la charla y sacando conclusiones que nos puedan servir para comprender mejor cómo funciona la creatividad, para poder así gestionarla mejor.

En primer lugar, una de las cosas más interesantes que menciona es que por muchos estudios e investigaciones que se han realizado, la creatividad sigue siendo un misterio. No se sabe de dónde sale. Así que respiremos hondo y relajémonos que todos estamos igual de perdidos con este tema jaja. Y además mola pensar que queremos vivir y trabajar de algo tan misteriosoooo.

Más cosas que deja claras: LA CREATIVIDAD NO ES UN DON DIVINO.

Es simplemente una manera de pensar u operar, no una habilidad natural que tienes o no tienes. De hecho, John define la creatividad como la facilidad de ponerse en modo juguetón, en modo “niño”.

Explica, y este tema es oro porque de repente comprendemos porqué a las personas creativas nos cuesta tanto centrarnos en desarrollar nuestras ideas y terminar lo que empezamos, que existen dos maneras de pensar u operar, y que hay gente que de manera natural utiliza más una que otra: Modo abierto y modo cerrado.

Modo cerrado: Centrado en implementar, ejecutar, solucionar, es un modo activo, tenso y enfocado a objetivos claros y concisos.

Modo abierto: Modo relajado, contemplativo, con humor, que no busca soluciones o resolver nada específico, busca el juego y se deja llevar por la curiosidad.

Para que lo entendamos mejor: modo cerrado sería como tener una visión de túnel, muy estrecha, y modo abierto sería como una vista aérea, muy amplia.

Después comenta algo muy bonito: Que lo que nos ha hecho evolucionar como especie ha sido EL PENSAMIENTO CREATIVO. Tatuémonos esto en la cabeza cada vez que dudemos del camino que hemos emprendido, recordemos que lo que nosotros queremos hacer no podrá ser sustituido por máquinas.

Y para poder gestionarlo mejor y potenciarlo y entrenarlo, esto es lo que John nos recomienda:

>> Hay que estar en modo abierto para buscar soluciones de manera creativa.

>> Una vez planteada la/s solución/es solo conseguiremos implementarla/s si cambiamos al modo cerrado.

>> Una vez implementado es bueno volver al modo abierto para revisar si vamos bien, y aprender a pasar de un modo a otro tan a menudo como sea necesario.  

Factores que nos van a ayudar a propiciar la creatividad (modo abierto)

1. ESPACIO

Es fundamental crearse un espacio donde no vayamos a ser interrumpidos. Donde podamos relajarnos y evitar las presiones habituales y cotidianas.

alarm

2. TIEMPO

Para crear espacio hace falta tiempo. El modo juego solo se puede establecer si creamos un marco de espacio/tiempo que tenga un principio y un fin. No puede formar parte de la cotidianidad, ha de ser un oasis de tranquilidad (y recomienda que como mucho dure 1h 30 m).

Pero esta parte es la más difícil, porque a nuestra mente le cuesta mucho enfocarse y cuando intentas ponerte a pensar en el problema, te vuelven las presiones y cosas urgentes del día, prefieres entretenerte haciendo lo que es urgente y sabes que puedes resolver o empezar y acabar. Centrarse en algo nuevo o grande y que no sabemos si seremos capaces de resolver, cuesta mucho.

¿Por qué nos pasa esto? Porque vamos a forzar a nuestra mente a algo nuevo, a algo a lo que no está acostumbrada. Pero hay que ser consciente de esto, tolerarlo, quitarle importancia y afrontarlo sin miedo, y así poco a poco se pasa esa sensación de agobio/procrastinación.

3. MÁS TIEMPO

Más tiempo. ¿Por qué? Porque debemos evitar conformarnos con la solución más rápida. Es importante dedicar más tiempo a jugar y darle vueltas al problema antes de enfocarte en una solución. Al final, las personas más creativas son aquellas que han dedicado más tiempo. Es así de simple.

¿Pero por qué cuesta tanto? Porque no tener una solución inmediata nos perturba, nos genera un malestar que queremos hacer desaparecer cuanto antes. Por eso muchas veces nos decidimos por la opción más rápida y no por la mejor, porque la opción más rápida nos hace sentirnos mejor inconscientemente.

Pero tolerar esta sensación y trabajar con ella es lo que te permite llegar a ser realmente creativo. Te tienes que dar el máximo de tiempo posible antes de decidir. Y hacer esto no significa que no seas una persona decidida, significa que entiendes cómo funciona la creatividad y utilizas las herramientas a tu favor. Así que solo tienes que preguntarte una cosa:

¿Cuándo necesito tomar realmente esta decisión? Y que ese sea tu límite.

4. CONFIANZA

Nada frena más la creatividad que pensar que te estás equivocando, que estás haciéndolo mal.

En el modo abierto, curioso, juguetón, de niño, de ¿qué pasa si…? nada puede estar mal. TODO VALE. La esencia del juego consiste precisamente en creer que cualquier cosa que pase estará bien. No puedes tener miedo. No puedes ser espontáneo si te empeñas en ser racional. Así que cuando estás siendo creativo NADA ESTÁ MAL. NO HAY ERRORES. Todo puede ser un canal hacia una solución, incluso lo más tonto, absurdo o mal hecho…

Así que confiemos en nosotros mismos y disfrutemos del juego sin juzgar ni analizar. Fluyamos sin miedo.

tag_faces

5. HUMOR

El humor es lo que más nos relaja y nos permite pasar fácilmente del modo cerrado al modo abierto. Aceptamos el absurdo, lo inverosimil, lo tonto. Nada es un error.

Aquí habla de los límites del humor y del problema que se genera cuando hay personas que se ofenden por todo porque confunden lo serio con lo solemne, cuando no tiene nada que ver. John considera que hay que poder reirse de todo, porque es sano y el humor no hace que nos tomemos de forma menos seria los temas importantes.

El humor es parte de la esencia de la espontaneidad y lo lúdico. Es esencial para poder resolver problemas con creatividad, da igual lo importante o serio que pueda ser.

John nos anima a que cuando estemos en modo abierto, revoloteemos de forma suave, amigable y persistente alrededor del problema (sin lanzarnos directos en plancha), y tarde o temprano saltará la solución.

También recomienda mucho jugar en grupo, porque eso fomenta muchísimo la creatividad (por eso hemos empezado a organizar losIlustrando Dudas Meetups):

>> En un ambiente cómodo y familiar que genere confianza.

>> Con gente con la que te sientas cómodo/a.

>> Con feedback siempre positivo. Evitando estas palabras: no, mal, no me gusta, ya, pero…  

La creatividad funciona como el humor, estableciendo conexión con dos marcos de referencia distintos que una manera nueva. Generando nuevas asociaciones y nuevos significados. Y aquí nos habla de la importancia del pensamiento lateral (capacidad de generar muchas soluciones alternativas para un mismo problema).

Por tanto, nos anima a romper con todo aquello que damos por hecho, jugando a crear conexiones locas o absurdas, con el objetivo de salir de lo lógico y de lo conocido.

ASESORAMIENTO PERSONALIZADO

¿Se te acumulan las dudas sobre la profesión? ¿Necesitas pedir feedback? ¿Tienes un encargo y no sabes presupuestarlo? ¡Podemos ayudarte!

Como véis, en esta charla John Cleese toca puntos clave que son imprescindibles para comprender el funcionamiento de la creatividad, y con esto nos permite tener a nuestra disposición recursos y herramientas para poder trabajar mejor, entender por qué nos sentimos como nos sentimos cuando no conseguimos avanzar en nuestro trabajo y qué podemos hacer para volver a ponernos en modo creativo.

Al final la clave está en jugar, sin miedo, en crear espacio/tiempo, dejar el móvil y el ordenador a un lado, tener paciencia y aguantar las sensaciones incómodas de abogio, procrastinación e incertidumbre que nos genera esta fase, y cuando por fin tengamos buenas ideas que creamos dignas de desarrollar, entonces asegurarnos de ponernos en modo cerrado.

Yo quiero añadir que pasar del modo abierto al modo cerrado es una de las cosas más difíciles para los creativos. Nos cuesta mucho centrarnos en ejecutar, solucionar, terminar. Por eso yo para concluir, quiero dar unas poquitas herramientas para facilitar esa transición y conseguir así ser más eficientes, ya que la clave de un buen creativo profesional, es saber pasar de un modo al otro con fluidez y maestría.

>> Cuando termines la fase creativa de trabajo, haz un descanso y realmente desconecta durante 20 min como mínimo, pero antes de irte, escribe en un papel lo que te tienes que poner a hacer cuando vuelvas. Y si puedes, deja recogido el espacio de trabajo, así no te distraerá al volver.

>> Utiliza Google Calendar para establecerte bloques de tiempos que destinarás para distintas cosas. Si puedes, organízate para que las tareas de modo abierto las pongas en el momento del día donde suelas estar más disperso/a, y las de modo cerrado donde suelas tener más capacidad de concentración.

>> Otro buen consejo es ponerte con las tareas de modo cerrado/ejecución a primera hora del día. Primero soluciona algo gordo que tengas pendiente, y así el resto del día estarás mucho más relajado/a para poder hacer tareas más creativas.

>> Por último y como recurso de emergencia si ves que nada de lo anterior te funciona, te recomendamos la técnica pomodoro, que consiste en proponerse resolver micro-tareas en periodos de 25 minutos contando el tiempo con una cuenta atrás.

Todo esto y muchos más recursos interesantes para conseguir ser más productivos, lo tenéis en nuestro post Cómo ser un ilustrador freelance mucho más productivo.

Y por fin, aquí os dejo con la charla, ¡a disfrutarla, que es oro puro!

Salir de la versión móvil