¿Qué conocimientos hay que adquirir para convertirnos en buenos ilustradores? ¿Qué músculos hay que entrenar?
Esta es la pregunta que todos nos hacemos cuando empezamos a recorrer el camino de la ilustración. Y en la mayoría de los casos creemos erróneamente que lo primero que hay que aprender son técnicas pictóricas, pero esa no es la respuesta.
La respuesta es: Bases de ilustración. Y te preguntarás: “vale, ¿y eso qué es?”
Pues las bases de ilustración son aquellos conocimientos teóricos-prácticos que te darán la información fundamental necesaria para poder contar y comunicar con imágenes (objetivo principal de la ilustración). Son los que te darán las herramientas para poder resolver la cuestión más importante cuando nos planteamos hacer una ilustración: qué quiero contar / compartir / crear.
Las bases más importantes son: Teoría de la imagen y de la percepción visual, Diseño de personajes y anatomía, Narrativa visual, Color, Perspectiva, Retórica visual, Historia del arte y de la ilustración, Análisis visual y Escritura Creativa.
Y cuidado con confundirnos y creer que aprender a controlar diferentes técnicas es igual o más importante que todo esto, porque no lo es. Las técnicas resuelven la cuestión del cómo lo quiero contar / compartir / crear. Poco importará cómo queramos resolver una imagen si no tenemos claro primero qué quiero contar y resolvemos esa parte de manera clara y potente.
Por tanto, las bases de ilustración son lo principal, los fundamentos. Y por eso hemos querido compartir contigo recursos que te ayuden a ejercitar y mejorar las diferentes bases. En este caso técnicas para potenciar la creatividad narrativa, la creación y desarrollo de historias, la escritura creativa y el storytelling.
¡Ala, a darle caña al lápiz!
