Lo que nos suele pasar es que vamos tomando decisiones un poco al tuntún y nos dejamos llevar por aquello que vamos descubriendo sin encajarlo en una lista de prioridades, sin analizar si esas decisiones nos acercan a nuestros objetivos, etc. Pero es normal, porque nadie nos ha enseñado estas cosas y lo hacemos lo mejor que sabemos.
La clave está en aprender a parar, analizar nuestra realidad, pensar profundamente sobre qué tenemos dentro de la mochila del “ilustrador profesional” y qué nos falta, y a partir de ahí tomar decisiones.
Por eso es tan importante identificar en qué punto del camino nos encontramos, porque sino será muy complicado definir cuál será ese siguiente paso. Esta guía te ayudará a conseguirlo.
LAS CUATRO FASES DEL ILUSTRADOR NOVEL
Dibujar siempre ha sido tu hobby pero cada vez estás sintiendo más interés por este mundo. Has descubierto que hay gente que vive de dibujar, y se llaman ilustradores. Te estás empezando a plantear que quizás tú también podrías intentar vivir de ello. Te dedicas a algo totalmente distinto, a lo mejor estás estudiando alguna carrera creativa como diseño, bellas artes o publicidad o estás terminando tus estudios en el instituto y estás pensando sobre qué te gustaría estudiar.
Ya estás metido de lleno en aprender ilustración, ya sea a través de unos estudios específicos de larga duración, o con cursos online, o de manera completamente autodidacta. Dentro de esta fase, que es larga, hay diferentes etapas:
Primera etapa: Técnicas, bases de dibujo, teoría visual…
Segunda etapa: Práctica y ejercicio de bases de ilustración (temáticas, formatos, narrativa, etc)
Tercera etapa: Enfoque a base de crear proyectos realistas, más cercanos al sector profesional y a los diferentes mercados de la ilustración. Feedback en profundidad. Descubrimiento y desarrollo de lenguaje personal.
Cuarta etapa: Profesionalización. Creación de proyectos realistas, familiarización con el funcionamiento de la profesión, estudio de los mercados, preparación de recursos y herramientas para darse a conocer.
Por fin sales del cascarón para lanzarte al mundo. Has terminado tus estudios. Sientes que es el momento de empezar a vivir de esto, sobre todo porque después de varios años sientes la presión de tu entorno y la necesidad de ganar dinero. Tienes obra como resultado de tus ejercicios de clase. Estás intentando crear tu portafolio y te has creado redes sociales. Más o menos empiezas a sentirte cómodo con un lenguaje o manera de trabajar que sientes como tuyo.
Ya te estás dando a conocer poco a poco. Tienes un portafolio online y las redes sociales con unos cuantos seguidores. Vas consiguiendo algún encarguito pequeño de gente conocida de vez en cuando, a veces te pagan, a veces no. No consigues arrancar del todo. Te gustaría llamar la atención de clientes con un perfil más profesional. Probablemente has conseguido un trabajo a media jornada que te permita mantenerte o sino lo has hecho, dependes económicamente de otras personas o de tus ahorros y sientes una presión enorme por conseguir encargos de ilustración.
ASESORAMIENTO PERSONALIZADO
¿Se te acumulan las dudas sobre la profesión? ¿Necesitas pedir feedback? ¿Tienes un encargo y no sabes presupuestarlo? ¡Podemos ayudarte!
¿Te sientes representado en alguna de esas fases que hemos descrito?
Es muy importante saber en cuál de ellas te encuentras, y por cuáles has pasado (o no) para poder saber cuáles serían los mejores pasos a dar desde ahí.
Es posible que al leer estas fases, descubras que has estado saltando de una a otra sin darte cuenta, o que has intentado atajar, realizando este recorrido de una manera caótica y/o poco eficiente. Probablemente esa es la razón por la que quizás sientes que te sientes perdido, confuso, frustrado o atascado. No te preocupes, nos ha pasado a todos. Lo importante es empezar a poner orden para entender por qué estamos en el punto en el que estamos.
El peligro de no hacerlo es que intentarás atajar, haciendo este camino sin pasar por todas sus fases, y te olvidarás de aprender cuestiones básicas y necesarias y eso generará lagunas que en un futuro te limitarán y te harán sentir atascado o frustrado porque no consigues trabajo como ilustrador y no sabes por qué.
Otra cosa muy habitual que nos sucede es que cuando nos empeñamos en mirar demasiado lejos y prestamos atención a cosas de las que no nos tenemos que preocupar todavía (porque en la ilustración, como en cualquier carrera creativa, uno se tiene que dar tiempo para aprender, explorar, jugar, observar, absorber, analizar, asimilar, madurar…) nos agobiamos, nos estresamos, nos impacientamos, nos juzgamos y generamos una presión negativa que se vuelve contra nostros y contra nuestro desarrollo, porque se convierte en inseguridades que nos bloquean y no nos dejan ni avanzar ni disfrutar del proceso de crecer como ilustradores.
Por eso, el primer paso esencial para avanzar en nuestra carrera consiste en lo siguiente:
– Conocer estas fases.
– Preguntarnos si las hemos recorrido todas correctamente o si no.
– (En caso de que no) detectar en qué hemos querido atajar y por tanto qué lagunas tenemos. Volver a atrás para llenar esas lagunas y sentirnos más seguros.
– Separar por completo nuestra necesidad de ganar dinero y vivir de la ilustración del proceso de aprendizaje y desarrollo profesional.
– Cuando te sitúes y tengas clara la fase en la que estás, piensa en cuáles son los pasos prioritarios para alcanzar la siguiente fase.
– Concéntrate en ellos y olvídate de todo lo que viene más adelante.
– Sé constante y disciplinado en tu trabajo y mantén tus prioridades siempre claras.
– Disfruta del camino, de dibujar, de aprender, de equivocarte, de explorar… Recuerda por qué decidiste dedicarte a esto. Porque te encantaba, así que eso debe seguir así. No dejes que las inseguridades y la presión arruinen tu carrera.
Esperamos que con este post, el desarrollo de tu carrera te resulte mucho más claro y sencillo. Y si a pesar de esto, aún te resulta difícil y no consigues avanzar, ya sabes dónde estamos ^_^