Seguro que llevas tiempo preguntándote cuándo se supone que deberías empezar a trabajar en tu portafolio. ¿Cuándo estarás preparado? ¿Cómo saber si tu trabajo tiene el nivel?…
El portafolio es el primer paso para convertirse en ilustrador profesional, y por eso nos da tanto vértigo. Es lógico.
En los años que llevo en esto he visto gente que se ha lanzado muy pronto, demasiado, y no han obtenido ningún resultado, y otros que no se atrevían a lanzarse por pánico a hacer el ridículo, y han retrasado muchísimo su entrada a la ilustración profesional cuando en realidad su trabajo tenía nivel y enfoque de sobra…
Así que, ¿cómo podemos saber cuándo es el momento correcto?
Te hago algunas reflexiones sobre este tema para que puedas tenerlo más claro:
Informarse, formarse y volverse a informar
Sé que parece obvio, pero muchas veces nos queremos lanzar a hacer algo sin tener ni idea de cómo hay que hacerlo, de qué implica, de qué necesitamos para poder hacerlo bien.
La mayoría creemos que un portafolio ha de ser un contenedor de todo lo que hagamos, pero no es así, como bien explico en “Los errores más típicos del ilustrador que empieza”. Por eso, el primer paso, da igual el nivel que tengas, es empezar a conocer bien todo lo relacionado con la creación del portafolio y la profesión de la ilustración.
Y repito, da igual el nivel que tengas ahora, da igual que estés en tus inicios y formándote aún, o que seas amateur o autodidacta, no importa que tu trabajo aún no tenga el nivel. Si quieres tener éxito en el mundo de la ilustración es necesario tener claro a dónde quieres llegar. Cuál es tu objetivo. Y para eso tienes que investigar y conocer la profesión, los mercados, las opciones de trabajo y cómo se hace un buen portafolio, da igual lo lejos que estés de poder empezar a crearlo.
Pensar y decidir
Con la información entre las manos, y habiendo explorado las opciones que existen, ya puedes empezar a decidir hacia dónde quieres dirigirte con tu trabajo. Eso te permitirá practicar, ejercitar y mejorar en una dirección clara. Para convertirnos en ilustradores no sirve sentarnos a dibujar cualquier cosa a diario. Hay que practicar cuestiones concretas dependiendo de en qué nos gustaría terminar trabajando. Ejemplo:
¿Te gustaría trabajar en prensa? Entonces tendrás que entrenar mucho el músculo de lo conceptual, de la metáfora y la retórica visual.
¿Te gustaría trabajar en editorial infantil? Entonces toca practicar la narrativa, el desarrollo de personajes, el storytelling, la composición y el color.
¿Te gustaría trabajar como concept artist en animación y videojuegos? Entonces tendrás que aprender a hacer storyboards, desarrollo técnico de personajes, colorscripts, visual development, etc.
Ser analíticos y desarrollar nuestro sentido crítico
Por mucho que nuestros familiares y amigos nos digan todo el rato lo bonitos que son nuestros dibujos, esto no sirve como baremo objetivo para saber si nuestro trabajo tiene el nivel mínimo necesario para competir a nivel profesional.
Es nuestra obligación desarrollar un ojo analítico. Mirar y consumir el tipo de ilustración en la que nos gustaría terminar trabajando preguntándonos constantemente por qué esa ilustración nos transmite tanto y cómo consigue hacer bien su función.
La clave está en cuestionarlo todo. ¿Por qué esto está hecho así? ¿Por qué el personaje está en ese lugar? ¿Por qué ha elegido este plano? ¿Por qué estos colores? ¿Por qué ha elegido estos elementos para crear esta metáfora visual?… Así, poco a poco, iremos ganando criterio y podremos analizar si nuestro trabajo va bien encaminado.
Si no lo tienes claro, pregunta
A todos nos cuesta preguntar y pedir opinión a personas que de verdad entienden del tema, pero te aseguro que darás pasos de gigante si cada cierto tiempo te asesoras con algún profesional que sepa sacar punta a tu trabajo o preguntas a compañeros ilustradores por una opinión sincera y clara sobre cómo ven tu nivel.
Cuando lo tengas claro, trabaja en los contenidos del portafolio, no solo en el contenedor
Si un portafolio no contiene trabajo interesante, sólido y coherente, da igual lo bonita que hagas la web o el pdf o la carpeta que contenga tu trabajo impreso. No llegarás a ninguna parte. Así que tus esfuerzos han de enfocarse en generar un contenido de nivel, pequeños proyectos que demuestren a cualquier editor o director de arte que eres capaz de resolver lo que te pidan.
Y la manera de mostrarlo, obviamente es importante pero secundaria hasta que no hayas creado esos proyectos. Después ya puedes preocuparte de cómo crear la web, o el pdf o tu portafolio impreso.
Valora tu tiempo y evita dolores de cabeza por encima de todo
Cuando empezamos, solemos estar faltos de recursos, sobre todo económicos, y por eso en vez de invertir nuestro dinero, decidimos invertir nuestro tiempo. Pero se nos olvida pensar en lo siguiente: El dinero se puede volver a ganar, pero el tiempo una vez lo usas, no lo recuperas. Por tanto, el tiempo es lo más valioso que tenemos. ¿Y por qué te digo esto? Porque al final invertir con nuestro tiempo muchas veces nos sale muy caro, aunque no queramos reconocerlo.
¿No crees que merece más la pena buscar la manera de orientarte y tener las cosas claras cuanto antes para no perder y malgastar tu valioso tiempo?
Ejemplo: Por desconocimiento, la mayoría al principio pensamos que hacernos un portafolio web significa tener que aprender WordPress, tener que contratar un hosting y a un programador / diseñador, creemos que nos va a costar mucho dinero, que es complicado, etc. Pues no es así. Hay opciones muy baratas, muy sencillas y que te ahorrarán mil dolores de cabeza. Pero si nadie te orienta y te cuenta todo esto, es muy posible que pierdas tiempo, des mil vueltas, te equivoques, inviertas dinero de más…
Por eso invertir en formación y en asesoramiento es la mejor manera de aprovechar bien tu tiempo y de ahorrar mucho dinero dando vueltas y probando cosas que luego puede que no te lleven a ninguna parte.
Por eso, en Ilustrando Dudas, sabiendo todo esto, hemos creado nuestro Curso Online “SOY ILUSTRADOR Y AHORA QUÉ”, para que dando igual el momento en el que te encuentras, puedas obtener la información y orientación que necesitas.
¿No lo tienes del todo claro? Bueno, aquí te dejamos las opiniones de algunos alumnos para que te hagas una idea de lo que te llevarás contigo al hacer nuestro curso…
Me parece una iniciativa inteligente y generosa. Dentro del mundo de la ilustración estamos bastante solos frente al mercado laboral e ilustrando dudas ayuda mucho a encontrar soluciones esenciales en la profesión. GRACIAS
Ilustrando Dudas me ha abierto una nueva perspectiva en mi camino como ilustrador, sobre todo ayudándome a encontrar mi sitio en un mercado ya saturado de ilustradores, centrándome y dirigiéndome a los clientes correctos teniendo en cuenta las características de mi trabajo, resumiendo me ha ayudado a ir poco a poco encontrando mi sitio. ¡¡¡Gracias īo!!!``
Ilustrando Dudas es el empujón necesario, el apoyo constante y el recurso infalible al que siempre acudir cuando tienes dudas sobre tu profesión como creador gráfico. Siempre les estaré agradecida, no estaría donde estoy ahora mismo sin su dedicación y trabajo por informar y ayudarnos.
Justo cuando terminé la carrera de Bellas Artes descubrí Ilustrando Dudas, vino para rellenar el hueco que faltaba en la formación, la parte más enfocada al mundo laboral. La sensación que tuve fue de 'justo era esto lo que necesitaba'. A raíz de los cursos e información que ofrecía mejoré en muchos aspectos de mi carrera. ¡Muy agradecido y feliz de que exista!
Me gustó mucho haber tomado el curso, en ese tiempo estaba empezando como ilustradora y me dio un panorama de cosas importantes que debía de considerar. Me ayudó a enfocarme en aspectos de mi trabajo y a categorizar sobre qué tipo de ilustración quería hacer. También me gustó que cuando empiezas no tienes mucha idea del negocio o en qué puedes trabajar y cómo se mueve ese mundo y aquí lo aprendí. Me hubiera gustado que durara más por qué realmente me gustó. 🙂
Un día me animé a hacer el curso con el plus de desarrollarlo con ayuda de īo a posteriori. Su atención y dedicación son impecables, se volcó conmigo no sólo en lo referente al curso, sino que en todo momento ha estado disponible para darme todos los recursos y conocimientos de que dispone a la hora de sumergirme en esta profesión de manera profesional y eficiente. Además hablar con īo es una maravilla, y recomiendo la página siempre que puedo.