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Crónica de un Valladolid Ilustrado (Vilustrado)

Todos los años desde hace cuatro se celebra en Valladolid un Encuentro Internacional de Ilustración bajo la marca Vilustrado que propone divulgar, discutir y conocer más sobre el mundo de la ilustración. Durante tres días muy intensos nos juntamos en la capital castellana un buen número de profesionales de la ilustración y de terrenos afines (editores, libreros, bibliotecarios, narradores, profesores…), a los que se nos proponen distintas charlas y talleres, a cuales más interesantes, de la mano de grandes nombres de la ilustración.

Para esta cuarta edición, Vilustrado ha contado con los talleres y charlas de Sonia Pulido, Ben Newman, Madalena Matoso, Jorge González, Julia Wauters y Marta Altés, además de con las ponencias de Marta Dehesa (letrada, cuentista, ilustradora y fotógrafa), Lara Meana (librera, mediadora lectora y escritora), Alberto García (editor en Fulgencio Pimentel) y Enrique Redel (editor en Impedimenta). Os contaré lo que saqué de las charlas, los talleres, la exposición del concurso “El recuerdo” y os hablaré del Encuentro para Familias.

LAS CHARLAS

El Encuentro se abrió el jueves 29 por la tarde cuando a las 17:25 a modo de chupinazo inaugural, Óscar del Amo, cabeza visible junto a Natascha Rosenberg de Vilustrado, nos daba la bienvenida a los asistentes y presentaba a la primera ponente, la ilustradora francesa Julia Wauters, que nos mostró muestras de su trabajo, unas ilustraciones sugerentes, cuidadas y medidas que se aprecian más si cabe al verla trabajar la técnica del estarcido o stencil, técnica que seguramente vendrá influenciada por sus estudios en serigrafía y en arte textil. Símplemente maravilloso. Habló de títulos suyos como “Une nuit, loin d’ici” (2011), “Fanfare” (2014), “Quand la sagesse vint aux ânes: Fables” (2015) o “Pierre et le loup” (2015), entre otros trabajos. Fue una charla fantástica a pesar de tener que fiarme del traductor.

Charla de Julia Wauters. Fuente Instagram: @vilustrado

Uno de los platos fuertes no se hizo esperar y Sonia Pulido “lo dio todo” en la segunda charla, y lo digo así, entrecomillado, porque no sólo lo dijo sino que lo demostró. Sonia dijo dedicarse a esto, aquello y a lo de más allá, y es que al final un ilustrador es así. Nos contó muchas cosas de su trabajo, de los diez años que ilustró la columna de Javier Marías en El País y cómo se enfrenta a su trabajo desde la sorpresa constante. Es una ilustradora que valora más el proceso que el resultado y que vive ese proceso con mucha intensidad y nos contaba que una vez que el arte final está y que la envía y ya se olvida. Sobre la técnica nos dijo que cada proyecto necesitaba su lenguaje propio y que le gustaba sorprenderse. Habló de sus experiencias con Oxfam, Lumen, y del mercado estadounidense, para el que también “lo dio todo”. Al finalizar pidió a los ilustradores que no perdieran la ilusión y a que respondieran ante su tiempo responsabilizándose con su trabajo.

Charla de Sonia Pulido. Fuente Instagram: @vilustrado

Al finalizar la charla la acompañamos a la sala de exposiciones donde nos guió por una exposición de sus trabajos en los que realmente vimos lo que a ella le interesaba: el proceso. Vimos imágenes de ese proceso y cómo resultaba el producto final, ilustraciones digitales o serigrafías, cubiertas de libros, carteles… Una maravilla, vamos.

Ya empezaba a hacer calor y aunque refrescó tras la tormenta de la noche anterior, el viernes estábamos ahí a las nueve y media de la mañana, puntuales, dándolo todo como decía Sonia Pulido, para escuchar a la ilustradora portuguesa Madalena Matoso (Premio Nacional de Ilustración de Portugal 2008), miembro del equipo creativo Planeta Tangerina (Planeta mandarina) nos comenta que allí sólo tienen dos reglas: la primera es no caer en fórmulas y la segunda desafiar siempre a los lectores, y vaya si lo hacen, los trabajos que hemos podido ver en Vilustrado, no todos traducidos al castellano, son obras geniales que permiten a los niños, a los lectores, da igual la edad, jugar e interactuar con el libro que es tratado como un objeto de juego en el que las imágenes crean frases… ideal para iniciar a los más jóvenes en el universo editorial y en la lectura. Las propuestas de “Planeta Tangerina” son arriesgadas ya que cuentan con troqueles, agujeros, esquinas redondeadas… lo que encarece las tiradas que en Portugal son relativamente escasas, como nos cuenta Madalena Matoso.

Charla de Madalena Matoso. Fuente Instagram: @vilustrado

A continuación era el turno de Lara Meana, especialista en Literatura Infantil, librera, escritora y muchas otras cosas más, que aportó al encuentro una visión muy valiosa tanto como escritora como también como directora de la maravillosa librería de Gijón El bosque de la maga colibrí y desde el punto de vista de la mediación lectora que son quienes, al fin y al cabo proponen las obras a los lectores y observan de primera mano cómo funcionan los distintos álbumes y libros ilustrados.

El título de esta charla era “Cuidado con la rana: 10 peligros a evitar en la creación de un álbum ilustrado” con el que hacía alusión a la obra gamberra de William Bee “Cuidado con la rana” y nos dio una serie de pistas importantes a tener en cuenta. Según Lara Meana, entre esos diez valiosos consejos que da a los ilustradores está el de leer álbum ilustrado, no ignorar a los lectores, recordar en todo momento que un álbum cuenta una historia que debe estar estructurada, o creerse muy original, lo que enlaza con la primera idea de leer mucho álbum ilustrado. Ella propone que haya un verdadero trabajo en equipo entre quien ilustra y quien escribe para evitar redundancias y que haya verdadera comunicación entre texto e imagen. 

Hay tantas ideas, tantas cosas que aprender tanto de ilustradores como de profesionales que se dedican al mundo de la literatura infantil y juvenil que podemos salir de estos encuentros con páginas y páginas de anotaciones o con maravillosos apuntes ilustrados como los que estaba haciendo a mi lado la ilustradora Calle y a los que no podía quitar ojo.

Notas ilustradas de Calle, durante la charla sobre autoría y propiedad intelectual de Marta C. Dehesa. Fuente Instagram: @ilustracalle

Tras el descanso nos esperaba ya la ilustradora catalana Marta Altés preparada para contarnos cosas muy interesantes de su trabajo, como por ejemplo cómo fueron sus inicios, su formación en Reino Unido, donde se marchó sin apenas saber inglés tras sus estudios de Diseño Gráfico y cómo se plantea las historias que cuenta en sus álbumes en los que cada imagen tiene distintos puntos de vista y que se complementan perfectamente con el texto. Marta Altés proyectó imágenes de sus libretas, story boards, que después pudimos apreciar, hojear y ojear durante los talleres. A todos nos parecía magia ver esos cuadernos, anotaciones (en inglés) y bocetos de álbumes que hoy día son de los más conocidos, como “¡No!” (2011), el tierno “Mi abuelo”, el divertido “Soy un artista”, “Mi nueva casa” o el más reciente “Pequeña en la jungla” (2017) un verdadero homenaje a la superación espléndidamente narrado que termina diciéndonos que “cuanto más pequeño eres, más se sienten los abrazos”. Si queréis conocerla más, os recomiendo esta entrevista: http://www.ahmagazine.es/…

Entrevista a Marta Altés. Fuente Instagram: @martaltes

Bocetos de Marta Altés Fuente Instagram: @periodista_de_bolsillo

La tarde del viernes y el sábado se dedicaron a los talleres y otras cosas, luego os lo cuento, pero la tarde-noche del sábado pudimos asistir a una de las charlas más interesantes para los que estábamos allí. Se trata de “La legalidad, los contratos y otras variedades” que de forma tan generosa, amable, divertida y didáctica nos presentó Marta C. Dehesa, directora de la asesoría jurídica Cola de Perro, letrada especialista en derechos de autor, además de ilustradora y premiada fotógrafa.

Cartel de la charla de Marta C. Dehesa

Charla de Marta C. Dehesa Fuente Instagram: @anaartistart

El tema es árduo, poco atractivo, si, e incluso tedioso, pero la forma en la que Marta nos lo contaba hacía que se hicieran cortas las apenas dos horas de la charla en la que más preguntas se hicieron a la ponente. Difícil de resumir todo lo que se contó. Importante reseñar que pocos o muy pocos de los que asistimos conocíamos algunas de las claves de las que se hablaron, que si fueran conocidas por los ilustradores podrían elegir en libertad las distintas reglas que se pueden establecer entre un editor y un ilustrador.

Conocer la estructura legal que rodea a los creadores podría hacer que se mejorasen las condiciones de trabajo. Ya no se trata de ganar más dinero, sino de controlar mejor el trabajo creativo que se genera y las distintas opciones de cesión de derechos que podemos manejar. Marta dijo algo muy importante, que los ilustradores trabajan en todos los sectores económicos porque no sólo intervienen en la producción editorial (educación, literatura, diseño, turismo, etiquetas…), sino también en el packaging, la animación, los videojuegos… y es que si en un momento dado, nos dice Marta, se paran todos los ilustradores, se pararía la industria.

Nos invitaba a ser proactivos para defender los derechos de un colectivo que, si estuviera más unido y asociado, podría conseguir grandes cosas. Las asociaciones de ilustradores como la APIM, por ejemplo, están haciendo grandes cosas por el colectivo pero con más asociados se podría mejorar mucho más y poder hacer más fuerza para evitar que los peces grandes nos devoren. Y ahí se habló también de tratar de no aceptar contratos o encargos abusivos con los que lo único que se puede conseguir es precarizar mucho más el trabajo de los ilustradores. La verdad es que salimos todos con una mezcla de satisfacción por conocer estas cosas y de rabia por no haberlas conocido antes. Es importante entonces activar labores divulgativas como las que está realizando Marta. Muchas gracias.

El domingo, último día de este cuarto Encuentro Internacional de Ilustración de Valladolid, pudimos escuchar al ilustrador británico Ben Newman que nos mostró lo mediático que era de niño y sus apariciones en la BBC en programas infantiles. Nos contó cuáles fueron sus referentes (la Pantera Rosa, Tom y Jerry…) Newman habló de uno de los personajes que le han hecho más popular (ahora de adulto) que es el Profesor Astro Cat, un personaje a través del cual ha realizado una serie de libros informativos sobre ciencia y astronomía verdaderamente didácticos y muy muy bonitos. Ben Newman nos contó sus inicios cuando dibujaba cómics y cosechaba malas críticas porque el final acababa en el principio. Y curiosamente nos mostró su último trabajo “Boo!” (2016) donde se plantea una estructura cíclica. ¿Qué diría ahora ese crítico?

Ben Newman además realiza trabajos personales, diseños de máscaras que empezó a hacer hace años con su padre y que, al igual que Sonia Pulido con la cerámica, les permite innovar y moverse en terrenos diferentes que en definitiva enriquecen la expresividad de los ilustradores.

Charla de Ben Newman. Fuente Instagram: @vilustrado

La siguiente charla titulada “El camino del editor” estaba conducida por la narradora oral Isabel Benito y tenía como participantes a Alberto García de la editorial Fulgencio Pimentel y a Enrique Redel de la editorial Impedimenta. Fue una charla bastante agridulce para el gremio de ilustradores, ya que que poca información se pudo sacar para saber cómo pueden estos acercarse a estas editoriales para tratar de sacar adelante proyectos editoriales con ellos, y es que casi nos quitaron las ganas de enviarles nada ya que según afirmaron, apenas el 10% de sus proyectos editoriales procede de propuestas que reciben, siendo el grueso de sus producciones prácticamente dedicadas a la compra de derechos y traducciones de productos que han funcionado bien en otros países.

Fulgencio Pimentel. Fuente Instagram: @vilustrado

La verdad es que da un poco de rabia que ninguna de las editoriales arriesgue en producción original cuando, según sus propias palabras, estamos viviendo un “momento muy dulce” en lo que a ilustración se refiere. También nos hablaron de las tiradas habituales en ambas editoriales que oscilan entre 1400 y 2000 (de los que cerca de un 5% no se venden, son para promoción). Tiradas de 250 ejemplares o de 5000 son poco habituales pero también las hay. Bueno, menos mal que sabemos que hay editores que tienen planteamientos abiertos a propuestas originales y novedosas que enriquecen el mercado editorial y dan trabajo a los ilustradores de este país cuyo talento es inmenso. Probaremos con ellos… en fin.

El último de los ponentes fue un emocionado Jorge González que nos habló de dos trabajos, el primero en el que habló de su abuelo, sus recuerdos de niño y de su hijo (normal no emocionarse), un cómic personal en el que está trabajando y en el que contará la vida de su abuelo, un futbolista que fue del Racing Club de Avellaneda en el que habla sobre qué es ser padre, qué es ser hijo y qué es ser nieto cuyo nexo de unión es el color naranja característico del pelo del abuelo y del hijo de Jorge. Para la segunda parte de esta charla le acompañó Katia, su actual pareja, y nos contaron cómo desarrollaron juntos un taller muy interesante de cómic en Corea en el que fusionaron el cómic y la interpretación, lo que permitía entrar más en los personajes y los alumnos eran capaces después de hacer ilustraciones diferentes y es que la expresión corporal es muy importante y dice mucho de la historia. Fue muy interesante comprobar cómo con el apoyo de otras disciplinas, un libro, un cómic o un álbum ilustrado puede ser mejor.

Jorge González. Fuente Instagram: @vilustrado

LOS TALLERES

Pido disculpas por no poder hablar de todos los talleres, y es que uno no tiene (todavía) el don de la ubicuidad y sólo podré hablar de aquellos en los que participé y en aquellos en los que me pude colar un poco o me contaron.

Estos talleres son fantásticos, es una oportunidad única de poder pasar un rato con grandes ilustradores y para conocer distintas metodologías de trabajo. Dependiendo de la propuesta que realicen, se puede entender mucho de su técnica, de cómo se enfrentan a los distintos proyectos, de su visión de lo que es un álbum ilustrado, de qué es lo importante… al margen de lo que específicamente te puedan enseñar o lo que cada uno pueda sacar en claro.

Hay dos tipos de taller, un taller largo (tarde del viernes y mañana del sábado) y taller corto (tarde del sábado). Os cuento un poco el taller largo de Marta Altés y el taller corto de Madalena Matoso.

Marta Altés nos trajo la propuesta “Una familia, una historia” a través de la cual nos invitó a crear un personaje, pero no desde un punto de vista técnico, sino entendiendo al personaje como alguien vivo que incluso podría formar parte de nuestra familia. Se jugó con el azar también a través del cual cada asistente sacó un papelito de una bolsa para ver qué personaje debía construir (un elefante, una manzana, una niña, un marciano…) y un segundo papel con una cualidad o peculiaridad para dotar de personalidad al personaje (que tenga alas, que sea diminuto, que tenga tres ojos…). Lo interesante fue tratar de diseñar, dibujar o plantear ilustraciones en las que poder sacar información de un personaje. Escenas que tal vez luego no sirvan para una historia pero que nos ayudarán mucho a entender al personaje, a construirlo. Marta nos mostró sus impecables pero trabajados cuadernos en los que veíamos eso, cómo iba construyendo un personaje y dibujaba escenas que después no se han publicado pero que eran muy útiles. Maravilloso sobre todo contar con su feedback, con sus certeros comentarios y propuestas que hacía que la cabeza se abriera más y más. Eso es genial y no ocurre todos los días.

Taller de Marta Altés. Fuente Instagram: @periodista_de_bolsillo

Madalena Matoso nos puso a “domesticar una sombra”, como si eso fuera fácil. Fue una propuesta muy divertida: con un papel negro y una tiza salimos a siluetear la proyección de la sombra de objetos que encontrábamos por ahí. Al final teníamos siluetas extrañas que recortadas nos iban a servir para montar una historia ¡madre mía! y al final se pudieron sacar un montón de cosas. Algo muy bueno, aunque nos daba muchísima vergüenza a todos, era exponer nuestro trabajo al finalizar. Todos sabemos que es un trabajo rápido, que no ha habido tiempo para reflexionar, que debíamos resolver cada problema allí y con los medios que disponíamos, rodeados de gente que mira… y eso es complicado pero es una parte importante también, ser capaces de argumentar y defender nuestro propio trabajo, porque si no lo hacemos nosotros ¿quién lo va a hacer?

Resultado del taller de Madelena Matoso. Fuente Instagram: @haikuzero

EXPOSICIÓN Y CONCURSO DE ILUSTRACIÓN “EL RECUERDO”

El Encuentro Internacional de Ilustración de Valladolid convocó en abril un concurso de ilustración bajo el título “El recuerdo”, y los trabajos de los 10 seleccionados se expusieron allí mismo y fueron comentados por sus propios autores el viernes 29 por la tarde. Estos seleccionados, por el hecho de serlo, pudieron participar prácticamente gratis del Encuentro e incluso con la manutención y dietas para los tres primeros seleccionados. La ilustradora ganadora, fue Anna Aparicio quien además de lo citado también se le entregó un iPad. Sus ilustraciones a juicio del jurado han sabido resolver muy bien la idea a través de unas imágenes que tenían mucha fuerza.

ENCUENTRO PARA FAMILIAS

El sábado por la tarde, mientras los mayores dibujaban, recortaban y pegaban, los más pequeños dibujaban, recortaban y pegaban en divertidos talleres organizados también desde Vilustrado. Estos talleres son también una forma de acercar a los niños al mundo de la ilustración a través de actividades plásticas muy divertidas y adaptadas para ellos a cargo de grandes ilustradores como Julio Falagán, Jorge Consuegra, Cintia Martín, Patricia de Cos, Alberto Sobrino y Fernando Pérez. ¡Casi nada!

Taller para Familias. Fuente Instagram: @librerialamarmota

FIN DE LA CITA

Todos los años desde hace cuatro se celebra en Valladolid un Encuentro Internacional de Ilustración bajo la marca Vilustrado que propone divulgar, discutir, conocer más el mundo de la ilustración, como decía en el primer párrafo… pero sobre todo estos encuentros hay que entenderlos como una oportunidad para disfrutar aprendiendo, para conocer gente muy interesante, a grandes profesionales y a pequeños profesionales. Los que nos conocemos por redes sociales nos ponemos cara, hablamos de nuestras cosas que en el fondo son las de todos los que allí nos encontramos. Este encuentro es una gran oportunidad para aprender no sólo de los que figuran en el programa, sino de todos con los que te encuentras y con los que se construye una red de aprendizaje y de comunidad que nos enriquece muchísimo.

Fuente Instagram: @alberto_albarran

¡Nos vemos en Vilustrado 2019!

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